Un Mensaje de la Presidenta en Funciones Victoria A. Lipnic

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Victoria A. Lipnic
Presidenta en funciones

Junio 2017

Mes del Orgullo LGBT, 2017

Los movimientos sociales se construyen a partir de una multiplicidad de personas que trabajan juntas para un objetivo común. Pero, a veces, los movimientos se ven representados por un puñado de personas muy especiales que logran cristalizar y simbolizar el conjunto de ideales que abraza el colectivo.

Este fue el caso de Frank Kameny, un veterano de la Segunda Guerra Mundial, empleado del gobierno y astrónomo del Servicio de Mapas del Ejército (AMS) a quien le dispararon en 1957, por el único motivo de ser gay. Ese tipo de ataques eran frecuentes en ese momento. Pero lo que no era frecuente era que una persona se defendiera y expresara sus ideas, tal como lo venía haciendo Kameny durante años, tanto en su propio nombre como en el de los demás.

Kameny fue un activista pionero de la Mattachine Society, una de las primeras organizaciones que lucharon por los derechos de los gays, cuyo nombre rinde homenaje a un grupo medieval y renacentista que organizaba rituales de enmascarados como forma de protesta contra la opresión.

Paradójicamente, la lucha de Kameny contra la intolerancia no fue detrás de una máscara. Él decidió hacerlo abiertamente y sufrió las consecuencias. Frank apeló formalmente su despido ante la Comisión de la Administración Pública de los Estados Unidos, precursora de la Oficina de Administración de Personal y de la Junta de Protección de Sistemas de Mérito, y si bien no tuvo éxito en ese entonces, la suya fue una de las primeras demandas por derechos civiles que se basaron en la orientación sexual. A pesar de las dificultades, siguió luchando, desafiando a la autoridad y al poder con su verdad y defendiendo los derechos de la comunidad LGBT. Con su increíble perseverancia, organizó piquetes en la Casa Blanca en la década de 1960, trabajó para derogar leyes discriminatorias, luchó contra la proscripción de los homosexuales en el ejército y se convirtió en el primer miembro abiertamente gay de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito de Columbia en la década de 1970; y finalmente la dedicación a su causa rindió sus frutos.

En la EEOC, valoramos la valentía de Kameny de muchas maneras. Fue un incansable defensor de los derechos de la comunidad LGBT en los Estados Unidos y continúa siendo un ejemplo en nuestra búsqueda diaria de un mundo más justo para todas aquellas personas que han sufrido discriminación laboral. En la EEOC nos enorgullecemos de ser defensores de los derechos de todos los trabajadores, al igual que Frank Kameny.